Actualidad

16/01/2022

/ , , , , ,

Cómo usar videos en una web correctamente

Introducción

Corría el  año 1895 cuando unos hermanos apellidados Lumiere desataron un fenómeno mundial que revolucionó la forma de ver la vida y de llevar mensajes a cualquier parte. Cuando hablamos de “video” englobamos todas las artes en que se transforma (cine, televisión, series, etc.) y una enorme lista de recursos en las que por medio de imágenes a gran velocidad conseguimos transmitir un mensaje.

En los últimos años el video ha evolucionado de tal forma que actualmente. Según el CISCO el 80% del trafico de la red es video. Puede resultar un dato impresionante pero si te digo nombro a Netflix, Zoom, Youtube, Tiktok, Facebook, PrimeVideo… ya entiendes que el video es el recurso preferido para comunicarse en el medio preferido por los usuarios: internet.

En este artículo vamos a hablar del video y de la importancia de saber configurarlo correctamente en tu proyecto web. Verás que hay muchas cosas que no sabías y estabas pasándolas por alto. Conocer bien el producto te hará tratarlo con más confianza.

Primeros pasos, lo más importantes

Como no podía ser de otra manera el primer paso es que pienses detenidamente en el destino del video que vas a usar. Es evidente que cada video es un mundo y por tanto cada video, o listado de videos tienes que estudiarlos. El resultado es que en producción ver estos vídeos sea un paseo en barca donde disfrutas de su contenido. Pero sabemos que en ocasiones no es así y esta mala planificación provoca que el usuario no obtenga una buena experiencia en tu sitio web.

A continuación veremos los aspectos más importantes a tener en cuenta a la hora de planificar un proyecto web que incluya vídeos.

Poster

Cuando ponemos un vídeo en una web no siempre queremos que se reproduzca.

Hay videos cortos que se reproducen en bucle y asumen un papel de background, pero si se trata de un video que quieres que se vea porque su contenido es importante has de configurarle un poster . Se trata de esta etiqueta:

<video src="videofile.ogg" autoplay poster="posterimage.jpg"></video>

Obtenemos dos ventajas al establecerse como un poster:

  • La pantalla de portada será más atractiva. Probablemente tu video tenga el primer frame en negro, así que si no configuras un poster, tu cuadro de video será una pantalla negra vacía.
  • Este poster carga al instante y puede que el vídeo, si es muy pesado, tarde un poco en cargar. Conseguimos enmascarar esa carga en segundo plano. Si tienes muchos vídeos en una misma URL que cargan a la vez es un proceso lento así que  puedes hacer que cargue al reproducirlo. Esto lo conseguimos con la etiqueta preload:
<video src="videofile.ogg" autoplay preload="none"></video>

Está de más decir que el poster ha de tener las mismas dimensiones en px que el video y una resolución de 72ppx. Y por supuesto ha de ser atractivo si quieres que vean el video.

Resoluciones

La palabra resolución, cuando hablamos de video, sufre un mal uso constante. La resolución de un video no es mas que la cantidad de píxeles de alto por ancho. No podemos llamar resolución a .H264 o a 16:9. Por tanto, aclarado lo que es la resolución, veamos cuales son los estándares más usados:

  • FHD, 1920x1080px. La más usada, aunque el 4k empieza a comer terreno.
  • HD, 1280x720px. Era la más usada pero la desbancó en poco tiempo FHD.
  • 4k, 3840 x 2160px. Aún en crecimiento porque precisa una gran tasa de datos y una pantalla con mucha densidad de pixeles.

La resolución es junto con el formato quien marcará el peso del vídeo por segundo.

Aquí es donde hemos de tener un gran tacto pues un video muy pesado puede afectar gravemente la usabilidad de la web. En este caso y al igual que pasará con la relación de aspecto, necesitamos una resolución diferente para cada dispositivo. Pero cuidado en este tema porque las pantallas están cambiando y cada vez tienen mayor densidad de píxeles. Por ejemplo, una pantalla de un desktop estándar podríamos decir que está en FHD. ¿Y una pantalla mobile? Pues aquí se ha desatado la locura y por ejemplo IPhone12 tiene 2340×1080 así que menos de FHD sería un error.

Lo aconsejable es hacer un desarrollo donde detectemos la resolución en ancho de la pantalla y en función de eso carguemos los vídeos con las resoluciones óptimas a ese dispositivo. Un código similar a este sería lo aconsejable:

<video id="video">

   <source src="movie.webm" type="video/webm;">

   <source src="movie.mp4" type="video/mp4;"/>

   <source src="movie.ogv" type="video/ogg;"/>

</video>

<script type="text/javascript">

   var srcRes = null;

   if (screen.width > 1920){

       srcRes = "_4k.";

   } else if (screen.width > 1280) {

       srcRes = "_FHD.";

   } else {

       srcRes = "_HD.";

   }

   document.querySelectorAll('source').forEach(el => el.src = el.src.replace(".", srcRes));

 </script>

Este código detecta el ancho de la pantalla del dispositivo, no la ventana del navegador. Para que funcione el código simplemente has de tener tu video en diferentes resoluciones y con un nombre igual para todos pero con la matiz de la resolución: _HD, _FHD o _4K.

Formatos

Este es uno de los temas más conflictivos a la hora de cargar un vídeo. Con el resto de ajustes el video se verá mejor o peor, tardará más en cargar o menos, pero por el formato del vídeo puede pasar que se vea o no el video dependiendo del dispositivo o navegador que uses. El formato hace referencia únicamente al tipo de archivo que exportamos.

Del formato podemos diferenciar la extensión y el códec. La extensión es el paquete que engloba ese formato (.mov, .mp4, .avi, etc.) y el códec es el leguaje de compresión que se usa para hacer que el video pese menos (MPEG2, H264, WebM, etc.).

En este caso la etiqueta video cuenta con una sub-etiqueta source y en su atributo src se puede colocar el formato de video. Así para una etiqueta de video, tenemos varios src y cada uno aporta el video en diferente formato.

<video>

  <source src="movie.webm" type="video/webm;"/>

  <source src="movie.mp4" type="video/mp4;" />

  <source src="movie.ogv" type="video/ogg; " />

<video>

Relaciones de aspecto

La relación de aspecto es la relación proporcional entre el ancho y el alto del frame. En esencia, es la forma del video. Hay multitud de estándares para configurar esta relación de aspecto entre los que vamos a destacar los más usados:

  • 16:9. Se trata del estándar más usado actualmente tanto en web como en dispositivos. Su resolución más usada sería FHD 1920x1080px.
  • 4:3. Es una relación que está perdiendo popularidad pues nos ofrece un frame muy cuadrado y el vídeo se aprecia más atractivo en formatos panorámicos. Su resolución mas usada sería 1280x960px, aunque el origen de esta relación proviene del sistema PAL que todos hemos tenido en casa, 720x576px.

Aunque lo normal es usar un estándar hay ocasiones en que el proyecto precisa unas relaciones de aspecto diferentes en cada dispositivo. Por ejemplo un banner en desktop con un video de fondo puede tener una relación de aspecto muy panorámica. Sin embargo en mobile su relación de aspecto será cuadrada o vertical. Aquí es donde entra en juego CSS y sus ajustes para background.

Veamos el siguiente ejemplo:

En este caso el video de fondo lo hemos configurado con la posición absoluta y en cada dispositivo jugamos con top, bottom, right, left y márgenes automáticos. En ocasiones hay que tener videos demasiado versátiles para que la perdida de información que se da de un dispositivo a otro sea asumible.

Reproductor

Por último veamos el modo en que queremos que el usuario interactúe con el video que le presentamos. Como hemos hablado anteriormente, si el video es un background, no tiene sentido que tenga botones, y si no quieres que salgan corriendo de tu página, tampoco debería tener sonido. Por eso vamos a hablar de los vídeos con los que el usuario debe interactuar. La etiqueta video nos ofrece estos atributos:

  • Autoplay: Booleano para que el video se reproduzca automáticamente tras cargarse.
  • Controls: Booleano para mostrar o no el panel de control del video de tu explorador.
  • Muted: Booleano para iniciar el vídeo sin sonido.
  • Loop: Booleano para indicar la reproducción en bucle del vídeo.

Hay casos en los que hay que desarrollar un estilo personalizado de reproductor. Para ello basta con no poner el atributo controls y configurarlos tu mismo con js y css. Os muestro un pequeño ejemplo:

<div class="container-video">

  <video id="video" src="movie.mp4"></video>

  <button onclick="reproducir()">Reproducir</button>

  <button onclick="pausar()">Parar</button>

</div>

<script type="text/javascript">

  window.reproducir = function() {

      document.getElementById("video").play();

  };

  window.pausar = function() {

      document.getElementById("video").pause();

  };

</script>

Conclusión

El vídeo es un elemento complejo al que prestar mucha atención porque configurarlo bien nos devolverá una experiencia positiva de nuestro desarrollo.

Por supuesto hay muchos temas que no hemos hablado en este video relativos al video como los fps (fotogramas por segundo), la tasa de bits de video o los campos (i o p), pero quizás esos temas sean parte del diseño del propio video y no de la implementación.

Para terminar me gustaría dejar ese fragmento del que empecé hablando porque como dicen es importante saber de dónde vienes para saber quién eres:

Actualidad

24/05/2021

/ , , , ,

Me encanta que los planes (de usabilidad) salgan bien

Cuando nos enfrentamos a cualquier proyecto podemos hacerlo de muchas formas, pero el resultado siempre queremos que sea satisfactorio.


Muchas generaciones recordamos la famosa frase de John Hannibal Smith de la serie “El equipo A” que titula este artículo. Podría haber usado otras series míticas como MacGyver como hilo conductor, pero necesitaba algo más potente. Me tentó también Michael Knight que encajaba bien como ejemplo de tecnología, pero improvisaba mucho.

Por eso el equipo A para lo que os quiero contar me pareció perfecto. ¿Os imagináis a Hannibal sin pensar una forma imaginativa para resolver las aventuras de cada episodio? ¿Sin definir un plan con sus compañeros de equipo? ¿Sin apoyarse en su experiencia previa como miembro de los cuerpos de élite del ejército?

Cuando abordamos un proyecto de usabilidad y experiencia de usuario cometemos errores básicos y simples, producto casi siempre de una insuficiente planificación y de repetir lo que vemos en otros proyectos. Planear bien las cosas tiene un montón de ventajas como evitar el retrabajo, acortar los tiempos de ejecución, asegurar la calidad del resultado, etc.

Os facilito en este artículo algunos ejemplos de buenas prácticas y recomendaciones, para que veáis que con poco que le deis al coco… ¡los planes siempre salen bien!


Mobile First, tatúatelo

Mobile First ha dejado de ser una tendencia y actualmente es un patrón obligatorio para diseñar un proyecto web.

Haz como MA Barracus y tatúatelo. El modo en que los usuarios actuales asumen ver los contenidos está basado en experiencias móviles. Estas experiencias se basan en pantallas sencillas con scroll vertical.

Mr. T
«Mr. T» by gameraboy is licensed under CC BY-NC 2.0

La mayoría de los proyectos ya son responsive, pero no podemos confundir ese término con Mobile First.

Hay un gran error de usabilidad que se sigue cometiendo y es el contenido en las pantallas. Se sigue haciendo contenido para pantalla de escritorio y se desarrollan responsive. El resultado será un sitio web que se verá bien en otros dispositivos, pero tendrá un exceso de contenido en una única pantalla y elementos poco accesibles para operar con una mano.

Por ello hay que recalcar que Mobile First denota también que las pantallas han de ser sencillas, concisas y fáciles de usar desde cualquier dispositivo.


El Header, nuestro vehículo en una web

¿Qué pensaríais si la furgoneta del equipo A se pareciese a ésta?

Es importante hacer un buen estudio del Header ya que es el primer elemento que tocar y se repite en todo el sitio web que estéis diseñando.

Hay varios errores que se repiten y son tan fáciles de corregir con el objetivo de simplificar tus propuestas y centrarte en lo esencial. Estos son algunos de los consejos para crear un Header que funcione:

  • Entre 5 y 10 items en el header. Muchos botones restan.
  • Que su altura no sea mayor de 150px. El header es importante, pero se va a repetir en toda la website y por lo tanto ha de ser ligero.
  • Que contrasten el fondo con las letras y si tu menú permanecerá fijado en la parte superior de la ventana, que contraste muy bien en todo el scroll vertical.
  • Ordenar por importancia los ítems en el header. No sigas tendencias, si lo importante son tus productos, no pongas en primer lugar “Mi compañía”. O si prevés que la búsqueda será el fuerte del sitio, no la dejes escondida al final con un icono de lupa.
  • El uso excesivo de iconos en el Nav resta. Más de 4 items con iconos es uso excesivo que despista al usuario.
  • La distribución más usada y que me mejor funciona es logo izquierda y Nav derecha. Centrar el logo y poner el nav partido o en una segunda fila hace que el header sea excesivamente alto.
  • Cuidado con los navs desplegables que no dejan de desplegar. Trabaja mucho las categorías que mostrar ya que en mobile es incómodo un Nav que sobrepasa en largo la pantalla.


Espacio libre, ¿un lujo?

Sigo utilizando ejemplos gráficos para avanzar en mis recomendaciones. ¿Te imaginas al Equipo A con un R5 en vez de la furgoneta molona que usaban?

¿Como viajar con todo el equipo a las diferentes misiones? ¿Como disparar esas metralletas?

El espacio, ya sea en un sitio web, en una misión del equipo A o en tu vida, es muy importante. El espacio libre es eso que una persona usa, sin ser consciente, para sentirse a gusto en dicho espacio.

Para que una web sea cómoda y se use a gusto ha de tener mucho espacio libre y estas son algunas de las pautas a seguir:

  • Planifica muy muy, pero que muy bien tus secciones y el contenido de cada una. Lo adecuado es que una sección no supere el tamaño de una pantalla (excluimos los listados de este consejo).
  • Si usas fondos o imágenes a sangre, es decir, full-width, no uses el texto en esa configuración.
  • Deja márgenes amplios entre secciones o contenido. Si lo empastas todo te pasa como con la plastilina, el resultado es una masa marrón.
  • No abuses del color, el video o la imagen. El blanco da paz y nunca falla.


Anuncios, banners, ventanas modales, políticas de cookies… ¡Que locuraaaa!

Se ha podido demostrar que el “Loco Murdock” no era un personaje ficticio si no que sus trastornos estaban causados por consumir sitios web como el que veis en la siguiente imagen:

Cuando hablamos de obtener una buena experiencia en el uso de una plataforma el tema de las promociones y publicidad pueden tirar por tierra todo lo que hayas trabajado en el Header, en el contenido o en la navegación.

El uso muy moderado de estos recursos de publicidad – bien propia o ajena – resta a tu diseño, pero si te dejan llegar a tu destino debes pensar en si te interesa el impacto que provocan. El uso desmesurado de dichos recursos no es que resten, te anulan. Hacen inservible tu sitio web.

Otros dos factores para destacar que salen de esa publicidad son los logins o suscripciones y las políticas de cookies. El login siempre ha de estar accesible pero no debes atosigar al usuario para que se registre: deja que te conozca y sugiérelo sutilmente. Haz lo mismo con la newsletter.

En cuanto a las políticas de cookies, todos nos hemos subido a ese tren, pero que esa legislación no nos impida ver tu página. No llenes toda la página con ese mensaje porque puedes conseguir que ya no la quieran ver. Un mensaje discreto es lo que mejor funciona.


Botones de redes sociales

Un error muy simple se da cuando alguien decide presumir de sus redes en su página web. Los hay que te las ponen en el Nav y que merecen ser castigados. Otros en el Footer, tienen mi clemencia. Y otros, almas cándidas, por todas partes. Pues compañeros, mal plan.

El sentido de esos botones es que conozcas esas redes, pero vamos a poner a funcionar nuestra materia gris: ¿dónde está expuesto el grueso de nuestro negocio? ¿en las redes sociales? ¿en el sitio web? Debería estar en el sitio web mientras que las redes sociales son canales que usas para que la gente llegue a dicho sitio web.

Os voy a poner un ejemplo. Entráis a una tienda a comprar y delante de cada producto hay otras tres puertas: una puerta que te lleva a la empresa que hace la publicidad de la tienda, otra que te remite a un cartel de la carretera y la otra de nuevo te lleva al escaparate. ¿No tiene sentido verdad? Lo suyo es que ese escaparate, esa publicidad y ese cartel sean los que te llevan a la tienda a consumir tus productos.

Pues en muchos sitios web se ha instaurado esa tendencia y es un gran error. Si al entrar lo primero que ves son las redes sociales estás invitando al usuario a que lo primero que haga es salir de tu página e irse a una red social, donde sí, estás tú, pero también otros cuantos millones de empresas como tú.

Cabe destacar que no podemos confundir el botón de redes sociales del Nav o Footer con los botones en blogs que sirven para compartir dicho post dentro de una red social. Estos si tienen un gran sentido ayudando al SEO de dicha empresa.

El mal uso de los botones que te llevan a redes sociales es algo muy instaurado y es un mal hábito para la usabilidad de cualquier proyecto. Si te hago salir justo cuando entras… ¡no creo que los planes salgan bien!